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SIGLOS ASESINANDO DIRIGENTES SOCIALES EN GOBIERNOS OLIGARCAS
|5 de Mayo de 2020
Uenseslao Guerrero de La Cruz,
expresidente de la Junta de Acción Comunal y líder comunitario de la vereda Curacas, fue ultimado
por dos motorizados que se dieron a la fuga en la municipalidad de Mercaderes, ubicada al sur del
departamento del Cauca
El 29 de abril de 2020, Álvaro Narváez Daza, presidente de la Junta de Acción Comunal de
la vereda El Bado del municipio de Mercaderes en el departamento del Cauca, fue asesinado por
hombres armados que llegaron a la finca en la que se encontraba y también asesinaron a su esposa
María Delia Daza Rodríguez, su hijo Cristian Narváez Daza y una nieta de 15 años de edad de nombre
Yeni Caterine López Narváez.
El 29 de abril, en el sector de La Variante,
municipio de Puerto Asís, fue asesinado un hombre conocido como “Iguano”, el 26 de abril en la
inspección Jordan Güisia, municipio de Valle del Guamuez, fue asesinado por hombres armados el joven
Luis Alberto Candelo de 24 años
Según información del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz
(INDEPAZ) en lo corrido del año 2020, han sido asesinados más 84 dirigentes sociales y defensores
derechos humanos en Colombia, 26 desde la aparición del coronavirus, 18 desde que inició la
cuarentena, 27 en el departamento del Cauca y más 24 excombatientes de Farc, firmantes del
acuerdo de paz, en lo corrido del año 2020.
El actual presidente de Colombia Iván Duque, con su partido de gobierno
de ultraderecha, lograron mantener a Colombia en una guerra que ha durado más de 60 años,
incentivando el odio y haciendo mentirosas campañas para que una parte del pueblo votara en contra
del plebiscito que pretendía poner fin al conflicto armado y construir una paz estable y duradera,
luego se dedicaron a dañar el acuerdo firmado entre el Gobierno y las FARC-EP, lograron su propósito
de empujar aun sector de los combatientes que se habían desmovilizado a retomar las armas, al tiempo
que han sido asesinados centenares de excombatientes que entregaron sus armas y por medio del
partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común, permanecen en la vida institucional leales al
acuerdo que firmaron, así no les hayan cumplido, lo cierto es que no es la primera vez que ocurre
tan doloroso despropósito y tienen al país como lo querían para seguir asesinando a dirigentes
sociales que son humildes pobladores que reclaman sus derechos y democracia.
La responsabilidad es del
Estado, su deber es proteger la vida e integridad de toda la población y no es correcto que el señor
Iván Duque siga encubriendo los crímenes y la represión que aplica contra los distintos sectores del
pueblo con palabrería y demagogia barata, permeada de corrupción y sus instituciones involucradas en
hechos criminales como el reciente caso del Ejercito Nacional, que con el apoyo económico de EEUU,
entre febrero y diciembre de 2019, hicieron seguimientos informáticos a sindicalistas, políticos,
periodistas, entre otros, hechos que son propios de dictaduras fascistas y hacen parte de la
doctrina de seguridad nacional que por años han aplicado en Colombia y han usado el concepto del
enemigo interno para masacrar, desplazar, torturar, desaparecer, judicializar, estigmatizar y
reprimir al pueblo, haciendo creer que son guerrilleros, narcotraficantes, o tratan de justificarlo
como hechos de atracos, pasionales y terminan justificándolo todo en nombre de la existencia de
organizaciones al margen de la ley y fortalecen la estrategia paraestatal y su maquinaria de
asesinos narcoparamilitares o simplemente todo lo evaden justificando que son actos propios del
servicio, el blanco legitimo o en el mejor de los casos, salen con el mismo cuento de siempre,
aduciendo que se trata de actos individuales de integrantes de las fuerzas del Estado, que tienen
conductas contrarias a los supuestos buenos propósitos de las instituciones y éstos criminales
quedan sin castigo, pasando a la justicia militar, que termina por exonerarlos y con el paso del
tiempo no solo hacen borrón y cuenta nueva, sino que posan de víctimas, manteniendo intacta la
estrategia de crímenes y terrorismo de Estado.
La oligarquía nacional que por siglos a
masacrado al pueblo, debe ser juzgada y castigada por crímenes de lesa humanidad y
genocidio.
Javier
Correa
Secretario General
Junta Directiva Nacional de Sinaltrainal